Tanto los responsables del restaurante Can Lluc como el Ayuntamiento han presentado alegaciones para que se reconsidere esa decisión
La terraza del Can Lluc, a pie de playa y construida con madera, forma parte de la estampa clásica de Cala Deià desde hace al menos medio siglo. Un lugar que frecuentan año tras año turistas, pero también residentes, para degustar comida mallorquina y pescado fresco. En declaraciones a este diario, Apesteguia aseguró no entender la resolución adoptada por Costas. «Si fuese un caso en que hubiese afectación medioambiental, lo podríamos entender. Pero es que no se da tal afectación», expuso el alcalde, quien recordó que los informes de Medio Ambiente son favorables a esta instalación.
Además, aseguró que le sorprendía que, en todo caso, Costas no tenga previsto desmontar la terraza si se confirma la no renovación de la concesión. La alegación municipal sostiene que los responsables de Can Lluc y del otro restaurante de la cala se encargan de recoger (Cas Patró March) la basura de la costa, al tiempo que defiende que albergan puntos municipales de primeros auxilios para atender posibles urgencias que se produzcan en este punto de litoral. «Ellos son los primeros que pueden responder», apuntó el alcalde. Además, agrega la alegación, colaboran con el Ayuntamiento en la regulación del acceso a la cala.
«En ese punto concreto hace una función concreta. Nosotros no tenemos competencias ni recursos económicos para hacernos cargo de la limpieza de la cala ni para contratar un servicio de socorrismo»
Apesteguia refirió que el mensaje que se ha trasladado desde el Consistorio a Costas es que debe reflexionar sobre las consecuencias que tendría esta decisión, a la hora de cubrir esos servicios que se prestan actualmente. «No es sólo que ese chiringuito esté dando trabajo a gente de la comarca y eso tiene un valor económico. Es que, además, en ese punto concreto hace una función concreta. Nosotros no tenemos competencias ni recursos económicos para hacernos cargo de la limpieza de la cala ni para contratar un servicio de socorrismo», arguyó el alcalde deianenc, quien emplazó a Costas a «replantearse» la situación.
Una situación que este verano ha afectado a otras instalaciones costeras, como ha denunciado reiteradamente Adopuma. Precisamente, el mes pasado, sus representantes mantuvieron una reunión con el Govern, que se saldó con el compromiso de que ambas partes colaborarán para que las tramitaciones administrativas ante Demarcación de Costas «se agilicen al máximo».